Texto y fotografías: Miguel Galmés
Cada año tiene lugar en Mongolia el ‘Naadam festival’, el mayor festival tradicional del país que es ampliamente seguido por los mongoles. El Naadam (Eriin Gurvan Naadam) viene a ser una especie de olimpiada en «los tres juegos viriles»: lucha mongol, carreras de caballos y tiro con arco, que se cree ha existido durante siglos, y que está estrechamente ligado a la historia y cultura del país en forma de desfiles militares y las competiciones deportivas que se disputan actualmente, y que en el pasado se disputaban tras las celebraciones de las grandes ocasiones.
La capital se prepara días antes para tal acontecimiento con conciertos, desfiles y muestras tradicionales que hacen de Ulán Bator estos días el lugar perfecto para disfrutar de la cultura más tradicional de Mongolia si no se tiene oportunidad de acudir a alguno de los otros Naadam más rurales que se celebran en los pueblos de todo el país.
Estos últimos tienen un ambiente muy diferente al de la capital y ciudades a pesar de que en todos se celebra lo mismo. Los festivales rurales más pequeños, muchas veces sin ninguna ceremonia de apertura ni de clausura, pero son muy intensos, donde uno puede sentarse y experimentar la acción mucho más de cerca y absorber plenamente su esencia y cultura.
Un viaje a Mongolia siempre es inolvidable, pero si se hace coincidir el viaje durante Naadam es simplemente mágico, ya que toda la nación celebra y muestra la cultura nómada, la pasión de la gente y el enfoque cultural lo convierten en una atmósfera excitante de la que formar parte. Por lo general el festival se celebra los meses de julio..
En 2010 la UNESCO incluyó el festival de Naadam en el Catálogo de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Los días previos al Festival Naadam, la capital se llena de eventos culturales. Desde el Festival Mongolian Deel, una celebración anual de la vestimenta mongol, hasta exhibiciones especiales en museos y galerías y conciertos públicos en la plaza Sukhbaatar.
Los actos oficiales comienzan con desfiles y la ceremonia de los nueve Estandartes Blancos utilizados por el ejército mongol desde épocas del imperio y que se custodian en el museo del Parlamento, en la Plaza Shukbaatar que preside la estatua de Genghis Khan.
Horas antes del inicio de la ceremonia de inauguración las inmediaciones del estadio nacional de Ulán Bator son un hervidero de gente. Turistas en grupos guiados que han pagado importantes cantidades para verlo en primera fila junto a las autoridades, campesinos venidos de las afueras y muchos capitalinos que han sacado sus mejores trajes tradicionales , llamados «dell», para asistir al evento más esperado del año.
Asistir a la inauguración puede resultar en ocasiones una misión imposible ya que las localidades se agotan pocas horas después de salir a la venta, una semana antes del festival. Hay que recurrir entonces al mercado de reventa y a los contactos, si se tiene.
Existen tres tipos de entradas para disfrutar de la ceremonia de inauguración de Naadam: Tribuna con sombra, que son las más caras y cuyo precio asciende a medida que se acerca al palco de autoridades; Tribuna sin sombra y por último el área de pie que son las localidades más baratas.
Los nueve Estandartes Blancos son llevados al estadio donde se colocan en un lugar destacado hasta que finalice el festival, dentro de tres días, y tras un discurso del Presidente del país comienza una elaborada ceremonia en la que participan músicos, bailarines, atletas, jinetes y una representación de los estamentos de la sociedad.
Finalizada la ceremonia, y tras un breve descanso, comienzan las competiciones. En el mismo estadio se concentran los luchadores, con sus trajes de dos piezas que consisten en un chaleco ajustado (zodog) y pantalones cortos (shuudag). En cuanto al chaleco existe una leyenda que se basa en el hecho de una princesa a la que ningún hombre podía derrotar en la lucha libre. Los hombres ahora luchan con el torso desnudo para evitar que una mujer entre en un torneo y los derrote nuevamente.
Reservado exclusivamente a los hombres, hasta 1.000 se enfrentarán en torneos individuales eliminatorios. El luchador con más fama tiene el privilegio de elegir a su oponente aunque aquí no hay categorías de peso por lo que un peso pluma puede competir con un “guerrero de Sumo”, lo que cuenta es la habilidad del luchador para poder tumbar a su contrincante y hacer que toque el suelo con cualquier parte de su cuerpo que no sean sus pies o sus manos sin un límite de tiempo establecido, mientras su «animador» particular (todos tienen uno) conocido como «zasuul» motiva al luchador.
El tiro con arco se celebra en un recinto cercano al estadio. En él participan hombres y mujeres en equipos de 10 y a diferencia del occidental no tiene un único blanco sino varios, llegando a disparar sus flechas desde una distancia de 75 metros los equipos masculinos y 65 los femeninos.
La destreza con arco del pueblo mongol dio forma a la historia del imperio de Genghis Khan permitiendo conquistar el mundo. Los arcos empleados en las competiciones son fabricados artesanalmente con corteza de abedul, cuernos de cabra montés y otros materiales naturales durante un año para que estén listo en la cita de Nadaam.
Los blancos son pequeños cilindros llamados «surs», dispuestos en una hilera. Cada vez que el tirador hace blanco el juez alza los brazos y grita «uuhai» (hurra). Cada equipo debe hacer blanco en 33 surs.
Las carreras de caballos se celebran a 50km de la ciudad y son recorridos campo a través de entre 15 y 30km con jinetes repartidos en seis categorías, incluidos de 5 a 13 años, compitiendo todos juntos. Estas competiciones suelen retransmitirse por televisión y son las pruebas estrella a través de las extensas llanuras mongolas. Los caballos que participan en las carreras son cuidados con mimo y de manera especial durante todo el año y se preparan a conciencia para el evento.
En la última jornada del Naadam se reconoce a los ganadores de los distintos juegos. En lucha serán reconocidos como titanes o avraga, y se elegirá al León de Mongolia, el hombre más fuerte del país. En tiro al arco los ganadores son nombrados «tirador nacional» y «tiradora nacional», y en las carreras de caballos los premios se otorgan a caballos y jinetes: el jinete ganador es elogiado con el título de «tumny ekh» o líder de diez mil, y los cinco mejores caballos de cada clase ganan el título de «airgiyn tav», y los tres primeros reciben medallas de oro, plata y bronce. Al acabar la carrera la multitud corre y rodea al caballo ganador. Dicen que tocar el sudor del caballo ganador trae buena suerte para el resto del año. Mientras, en la categoría de caballos de dos años, al último caballo en cruzar la línea de meta se le canta una canción deseándole suerte para ser el ganador del próximo año.
Hoy en día el Naadam sirve para conmemorar la revolución de 1921 que llevó a que Mongolia se declarase país libre e independiente.
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